Me gustaste desde que te vi
mi cielo se poblo de angeles por ti
y casi sin quererlo me escogiste a mi
casualidad o no hoy estamos aqui.
Te extraño en estos dias calurosos
y en las noches oscuras,
necesito un poco de tú frescura
un poco de tú luz.
Estoy contigo sin estarlo
pues te llevo presente a cada instante.
Rezo cada noche y le pido a Dios
que me preste un trozo de luz para alcanzar la calma.
No puedo negar que sueño con tú regreso,
con que me abraces tan fuerte que me duelan los huesos,
con que me des un prolongado beso
que me despierte de este mundo de ensoñación.
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